Moimenta da Beira

Tiene un clima mediterráneo con aires continentales, inviernos fríos y veranos secos y calurosos, y está situada entre el valle del Duero y el altiplano de Beira Alta. Limita al norte con los municipios de Tabuaço y Armamar; al oeste con Tarouca; al suroeste con Vila Nova de Paiva; al este con Sernancelhe; y al sur con Sátão. Geográficamente, se sitúa al norte del distrito de Viseu.

Tiene cerca de 200 kilómetros cuadrados y cerca de 10.000 habitantes divididos en 16 freguesias y 4 uniones parroquiales. Por su morfología, las zonas más elevadas son la sierra de Leomil (1009 metros), donde nace el río Paiva, uno de los cursos de agua menos contaminados de Europa, y la sierra de Santo Antão (841 metros).

En las montañas de Leomil abundan los vestigios prehistóricos, como los dólmenes de la meseta de Nave y varios castros, como el de Caria (desaparecido), el lusitano-romano de Sanfins (Passô), el amurallado de Peravelha y varios menhires importantes.

En cuanto al patrimonio, tanto histórico como arquitectónico, me gustaría destacar el convento benedictino de Nª Srª da Purificação, fundado en 1594, que conserva en su interior un zócalo de azulejos policromados del siglo XVII y la tumba de su fundador.

En el barrio, destacan las nobles casas blasonadas de los Guedes, Carvalhos y Almeidas. En el municipio, destacan las picoletas. La de Vila da Rua es encantadora, una de las más bellas del país. Está clasificada como “Monumento Nacional” y es una popular atracción turística, al igual que las artesanías ancestrales, que van desde cestas a capas y capotes de burel, calcetines de lana, mantas de patchwork, zuecos de montaña y lino.

El embalse de la presa de Vilar, a pocos kilómetros de la cabecera comarcal, es otro lugar de gran interés turístico. Sus aguas son muy codiciadas y en sus inmediaciones hay un camping y caravaning, un parque de deportes extremos, un restaurante de cocina de autor y un bar con terraza a orillas del embalse, junto a la arboleda que hay más allá. Además, el municipio cuenta con otras zonas de baño, como Segões, un pequeño paraíso donde el color oscuro de las aguas del río Paiva, que forman un hermoso espejo de agua, sorprende a los más desatentos, ya que es el resultado de la presencia de sales minerales, muy buscadas como tratamiento para enfermedades de la piel. La zona está dotada de una extraordinaria biodiversidad acuática y terrestre, y en sus alrededores se encuentra un centro de acogida para turistas de naturaleza.

De vuelta a las altas montañas de Leomil, para ver dos de las decenas de torres eólicas que sostienen las obras de arte urbano de Joana Vasconcelos y Vhils. Son las mayores obras de arte urbano del mundo, con unos 100 metros de altura. Los dos artistas portugueses proyectaron en estas torres elementos de la memoria colectiva, la cultura y la riqueza natural de la región.

Moimenta da Beira es también la tierra de la manzana, la mejor manzana del mundo, que inspira ExpoDemo, un gran acontecimiento festivo que se celebra todos los años a mediados de septiembre. También es cuna de los vinos espumosos Terras do Demo, producidos aquí por la Cooperativa Agrícola de Távora.

Y es tierra de cultura, cuna de escritores famosos como Aquilino Ribeiro, António de Sèves, el poeta Luís Veiga Leitão, el cuentista pionero del neorrealismo en Portugal Afonso Ribeiro, y el editor y poeta Eduardo Salgueiro.

¡Moimenta da Beira es un mundo por descubrir!