Tarouca es un municipio típicamente rural y agrícola, que destaca en la producción de bayas de saúco y en la transformación de carne y ahumados.

Su territorio cuenta con diversos atractivos naturales y patrimonio cultural y arquitectónico.

Mirador:

El mirador y columpio Cristo Rei ofrece una vista sobre Tarouca, invitando a detenerse e inspirarse.

Espacios verdes:

Tarouca cuenta con espacios verdes como la Serra de Santa Helena, un lugar donde la calma de la naturaleza nos invade, y podemos pasear, disfrutar de las estrellas por la noche o incluso recorrer las pistas de Descenso y Motocross. El Morro de Alcácima es un lugar donde los más pequeños pueden observar a los animales, cuidar del huerto y jugar en el parque. El Parque Fluvial de la Tarouca invita a pasear en plena naturaleza o a hacer un picnic en el merendero. También cuenta con un parque infantil, una pista de skate, un campo de minigolf y un gimnasio al aire libre.

 Museos:

Tarouca cuenta con la Casa do Paço de Dalvares y Museo del Vino Espumoso, que data de la Edad Media. Actualmente alberga el museo del vino espumoso.

 Patrimonio:

Tarouca cuenta con varios edificios y monumentos patrimoniales. Destacan el puente fortificado del siglo XII y la torre de Ucanha. Su historia está escrita en sus piedras. En todo el municipio se pueden encontrar picotas, como las de Tarouca, Ucanha, Mondim da Beira y Várzea da Serra. 

También se encuentran los puentes románicos de Vila Pouca de Salzeda, São João de Tarouca y Mondim da Beira.

Otros puntos de interés son: el Arco de Paradela, la capilla de Senhora das Necessidades, la Iglesia de São Pedro de Tarouca, el Monasterio de Santa Maria de Salzedas y el Monasterio de São João de Tarouca.